Estilos de crianza: Una guía para padres y madres
- José Alaniz
- 11 feb 2024
- 6 Min. de lectura
Actualizado: 15 feb 2024

En la actualidad, la crianza se ha convertido en un tema central de discusión tanto para expertxs como para aquellxs interesadxs en estos temas. Términos como "crianza con amor", "crianza consciente" y "crianza positiva" han inundando los medios y las redes sociales. Muchas personas hablan de ello, incluso hay cuentas en Tik Tok, Instagram, Facebook, dedicadas a la divulgación y psicoeducación basada en alguno de estos u otros modelos. Pero, ¿qué significan realmente estos conceptos?, ¿y cómo se relacionan con los estilos de crianza basados en evidencia de que sí funcionan?
Diferencias entre los estilos de crianza
Aunque estos términos a menudo se usan indistintamente, cada uno tiene sus matices. Veámoslos al detalle:
a) Crianza con Amor: Este enfoque se basa en la idea fundamental de que el amor y el afecto son componentes esenciales en la crianza de los hijos. Autores como Leo Buscaglia y Gary Chapman han abordado este modelo, destacando la importancia de expresar amor de manera constante y afectuosa hacia lxs hijxs. Libros como "El amor en la familia" de Leo Buscaglia y "Los cinco lenguajes del amor para niños" de Gary Chapman ofrecen perspectivas sobre cómo cultivar relaciones familiares saludables a través del amor y la conexión emocional.
b) Crianza Consciente: La crianza consciente implica estar presente y atento a las necesidades emocionales, físicas y sociales del niño en cada momento. Autores como Jon Kabat-Zinn y Shefali Tsabary han explorado este enfoque, enfatizando la importancia de la atención plena y la conexión emocional en la relación entre padres/madres e hijxs. Libros como "Crianza consciente" de Shefali Tsabary y "Educar con mindfulness" de Daniel Rechtschaffen ofrecen herramientas prácticas y consejos para cultivar la atención plena en la crianza.
c) Crianza Positiva: La crianza positiva se centra en el refuerzo positivo y la disciplina sin castigo, promoviendo un enfoque basado en la construcción de relaciones afectuosas y respetuosas entre padres/madres e hijxs. Autores como Jane Nelsen y Alfie Kohn han abordado este tema, destacando la importancia de establecer límites firmes, pero amorosos y fomentar la autonomía y la responsabilidad en lxs niñxs. Libros como "Disciplina positiva" de Jane Nelsen y "Unconditional Parenting" de Alfie Kohn ofrecen estrategias prácticas para criar hijxs segurxs, felices y resilientes.
Estos son solo algunos ejemplos de autores y modelos de crianza que abordan los diferentes enfoques mencionados. Cada uno ofrece perspectivas únicas y herramientas prácticas para ayudar a los padres y madres a cultivar relaciones positivas y saludables con sus hijxs. Ninguno es mejor que el otro, todos sirven, pero no todo le viene bien a tu estilo particular de ser (personalidad), así que te invito a leer, poner en práctica y ver con cual te siente más cómodx.
¿Qué dice la psicología basada en evidencia sobre los estilos de crianza?
Los estudios científicos sobre estilos de crianza han identificado varios modelos, pero uno de los más ampliamente reconocidos es el propuesto por Diana Baumrind en la década de 1960. Sus investigaciones llevaron a la identificación de cuatro estilos principales de crianza: autoritario, permisivo, autoritativo y negligente.
a) Autoritario: Este estilo se caracteriza por altos niveles de control y baja calidez. Los padres/madres autoritarixs imponen reglas estrictas y disciplina firme, pero a menudo carecen de comunicación abierta y apoyo emocional.
b) Permisivo: En contraste, el estilo permisivo se caracteriza por altos niveles de calidez, pero baja exigencia. Los padres/madres permisivxs tienden a ser indulgentes y poco exigentes, permitiendo a lxs hijxs tomar decisiones sin límites claros o consecuencias.
c) Con autoridad: El estilo “con autoridad” combina altos niveles de calidez con una estructura clara y límites firmes. Los padres/madres con autoridad establecen reglas claras y consistentes, pero también fomentan la comunicación abierta, el razonamiento y la autonomía en sus hijxs.
d) Negligente: Finalmente, el estilo negligente se caracteriza por bajos niveles de control y calidez. Los padres/madres negligentes muestran poco interés o participación en la crianza de sus hijxs, lo que puede resultar en falta de supervisión y apoyo emocional.
Los estudios han demostrado consistentemente que el estilo “con autoridad” está asociado con resultados más positivos en el desarrollo infantil, incluyendo mayor autoestima, mejor desempeño académico y habilidades sociales más fuertes. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el mejor estilo de crianza puede variar según el contexto cultural, las características individuales del niñx y otros factores contextuales.
La psicología basada en evidencia enfatiza la importancia de cultivar un estilo de crianza “con autoridad” (o autoritativo), que combine calidez y control, así como una comunicación abierta y afectuosa con lxs hijxs. Sin embargo, también reconoce la necesidad de adaptar el enfoque de crianza a las necesidades individuales de cada niño y las circunstancias familiares específicas.
No hay una única manera correcta de criar
Si bien el estilo autoritativo se destaca como el más efectivo, no hay una fórmula única para la crianza. Cada familia es única y es importante adaptar el enfoque de crianza a las necesidades individuales de lxs hijxs y las circunstancias familiares.
Acá deseo hacer especial énfasis en no dejarte estafar con que tal estilo es mejor por tal o cual cosa, hay muchos modelos y enfoques, si me lo permites, lo mejor siempre es consultar con unx expertx de la salud mental y ver según tus necesidades como mamá/papá, tu contexto y el de tu hijx, ¿cuál les vendría mejor? Y no compararse, porque cada familia es diferente y todas tienen sus propias luchas, aunque no las veamos.
Evaluando fuentes de información
Si bien las redes sociales pueden ser útiles para compartir experiencias, es importante evaluar críticamente la información que se encuentra en ellas. Buscar fuentes confiables, como investigaciones científicas y expertos en el campo de la crianza, puede proporcionar una base más sólida para tomar decisiones informadas sobre la crianza de tus hijxs.
Fuentes de información confiables
Para obtener información basada en la evidencia, se pueden consultar libros, artículos académicos y sitios web de organizaciones reconocidas en el campo de la psicología infantil y la crianza, como la American Psychological Association (APA) o la Sociedad Española de Psicología.
Estrategias para una buena crianza
Acá te doy algunas estrategias para una buena crianza adaptada a las diferentes etapas del desarrollo:
a) Infancia temprana (0-3 años):
-Establecer rutinas consistentes para dormir, comer y jugar, proporcionando seguridad y previsibilidad.
-Brindar mucho contacto físico, afecto y atención para satisfacer las necesidades emocionales del bebé.
-Fomentar el juego interactivo y el aprendizaje a través de actividades que estimulen los sentidos y la exploración.
b) Edad preescolar (3-6 años):
-Establecer límites claros y consistentes, explicando las reglas de manera sencilla y brindando elogios y refuerzos positivos por el comportamiento deseado.
-Fomentar la autonomía y la toma de decisiones limitadas, permitiendo que lxs niñxs participen en tareas domésticas simples y actividades de cuidado personal.
-Promover el desarrollo del lenguaje y la socialización a través del juego con otrxs niñxs y la interacción con adultxs.
c) Edad escolar (6-12 años):
-Apoyar el desarrollo académico y emocional, mostrando interés en la educación y las actividades extracurriculares de lxs niñxs y brindando apoyo en las dificultades.
-Enseñar habilidades para resolver problemas y gestionar emociones, modelando comportamientos positivos y proporcionando herramientas para afrontar los desafíos.
-Fomentar la independencia y la responsabilidad, asignando tareas y responsabilidades acordes a su edad y habilidades.
d) Adolescencia (12-18 años):
-Mantener una comunicación abierta y respetuosa, escuchando activamente las preocupaciones y perspectivas de lxs adolescentes y brindando orientación y apoyo cuando sea necesario.
-Establecer límites claros y negociar reglas y expectativas con los adolescentes, fomentando la autonomía, pero manteniendo la supervisión y el seguimiento.
-Promover la autoestima y el desarrollo de la identidad, reconociendo y celebrando los logros individuales y apoyando la exploración de intereses y metas futuras.
e) En todas las etapas de la vida:
-Modelar comportamientos positivos, recordar que mamá y papá son modelos de comportamiento para sus hijxs; demostrar respeto, empatía y resolución de problemas establece un ejemplo valioso.
-Crear un ambiente seguro, proporcionar un hogar seguro física y emocionalmente de acuerdo a tus circunstancias, donde lxs niñxs se sientan protegidxs y apoyadxs.
Estas estrategias proporcionan un marco general para una crianza efectiva en cada etapa del desarrollo, pero es importante adaptarlas según las necesidades únicas de cada niñx y las circunstancias familiares específicas. La flexibilidad, el amor y el compromiso son fundamentales en el proceso de crianza.
En Resumen…
La crianza es un viaje lleno de desafíos y aprendizajes, pero con el conocimiento adecuado y las estrategias apropiadas, los padres y madres pueden nutrir relaciones sólidas y promover el bienestar emocional y el desarrollo de sus hijxs.
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